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Debo admitir que ya todo me da igual. |
Yo te quería, lo hubiera dado todo por ti. Yo era alguien concienciado, hacia todo pensando en un bien futuro, no dañaba a nadie ni a mi misma. Hasta que en un momento todo cambió. Cambié yo y cambió mi forma de pensar. En ese momento mi universo dejaste de ser tú y empezó a ser lo de debajo de tu ombligo. Deje de buscar tus abrazos y besos, cualesquiera me servirían para disfrutar. Justo ahí fue cuando deje de buscar tu mirada entre la de toda la gente. Pase de ser la más sana de todas a dejarme llevar por vasos llenos de alcohol. Solo buscaba evasión, volar lejos sin nada que me molestara. Tú dejaste de ser motivo para mis sonrisas y empecé a pensar en ti como uno más de la lista. Perdí respeto hacia las instituciones de poder y quise desgarrarme a mi misma o venderme a alguien que me aprovechara mejor. Todo fue extraño, el futuro dejo de importar. Yo que siempre había sido crédula ante las muestras de amor de otros me volví exceptica a lo sumo. Buscaba mil excusas para que ellos creyeran que no era para ellos, mas cuando les perdía me arrepentía. Que enrevesada me he vuelto, que poco comprensibles son mis actos ahora. Si me devoran y después se largan sin decir nada es mejor. Si me presionan y buscan algo más que lo inmediato, me echo para atrás. Me da miedo amar de nuevo. Me da terror volver a ser como antes, sufrí bastante, como la mayoría supongo, pero yo no lo supe llevar y me derrumbe para resurgir cubierta de esta indiferencia. Ahora no estoy segura de quererla perder, es como una droga que me ayuda a olvidar, es mi vaso de vodka y mi cigarrillo de nicotina.
Es mi manera de poder decir que ya todo me da igual.
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Y mi universo esta debajo de tu ombligo,
Mi libertad es encerrarme hasta verte pasar. |
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