jueves, 1 de marzo de 2012

#.La Historia Acaba de Empezar.

"Soy atractiva, soy atractiva, soy atractiva,...", se repetía Laura una y otra vez con los ojos cerrados en la esquina de aquella discoteca a la que Nadia, su amiga, la había arrastrado. Había leído por allí que esto funcionaba, que si te convencías de que eras atractiva los demás también lo pensarían, aunque la verdad no se fiaba mucho de aquellos augurios de vieja loca. Pero al abrir los ojos se encontró con otros que la miraban fijamente. ¡Era él! Había visto a aquel chico hacia días en la puerta de la biblioteca cuando ella salía perdiéndolo todo porque llegaba tarde a cuidar de su hermano. Aquel día él se le había quedado mirando exactamente como lo hacía ahora. Era bastante guapo, como hubiera dicho su amiga era un tío que tenía un buen polvo, pero es que ella era mucho más bruta. A Laura no le iba decir esas cosas, y nadie hubiera puesto esas palabras en su boca, pero ahora le apetecía decirlas, porque tampoco nadie hubiera dicho que aquel chico se la quedara mirando a ella. Pero lo estaba haciendo, ¿no? Lo estaban viendo todos, bueno, en realidad no. Nadie estaba nuca pendiente de Laura, Nadia llamaba mucho más la atención. Era alta, esbelta, con un pelo rubio brillante de pelicula, dos tetas bien puestas, el culo duro, guapa; vamos, el sueño de cualquier adolescente con las hormonas descontroladas.

¿Me miras a mí?
- Que ella sea guapa no significa que tú seas fea.

¡Él estaba detrás de ella! ¿Cómo había llegado allí? ¡Qué susto! No le había visto acercarse.

- ¿Qué?

- Que tú también eres guapa.

- ¿Y eso quién lo piensa?

- Lo piensan esos tres chicos de la barra que miran por turnos sin que los otros lo sepan, también el chico con el que está tu amiga y su amigo sentado en la mesa, y, además, lo pienso yo.

Con esa última frase Laura casi cae de bruces. ¿Él creía que ella era guapa? No se lo podía creer, eso no podía ser verdad. ¿Seguro que se había levantado de la cama aquel día? Estaba completamente segura de que aquello no era un sueño, pero como saberlo con él tan cerca.

- ¿Cómo sabes lo que piensan los demás?

- Igual que sé lo que piensas tú.

Un estremecimiento la recorrió de arriba abajo. El misterio que envolvía aquellos ojos de color gris era inmenso y la estaba rodeando completamente. Se sentía borracha, pero no había bebido. Se sentía drogada, pero jamás se había acercado a nada que la perjudicara. Era él, él y su voz, sus palabras, su boca, su nariz, su respiración, sus ojos, sobre todo sus ojos. No parecían de aquel mundo. En ese momento entro en ese estado en el que sigues vivo pero no recuerdas nada, en el que actúas y olvidas, él era el que le había llevado a esto, ¿qué estaba pasando?


Y la noche no dejo rastro de lo que había sido, ¿era un sueño? Ella lo recordaba como que no y al darse la vuelta encontró la prueba de que todo era real, de que aquel chico iba a volver: se había dejado el móvil con un mensaje escrito, "Nos vemos a las 6".

***


1 comentario:

Elena S dijo...

Holaaaaa! Te he nombrado en mi entrada, espero que te pases pronto por mi blog. Por cierto, el tuyo me encanta (: Un besote!