Hace tiempo deje de buscar monstruos. Deje de buscarlos en el fondo de mi armario cuando comprendí que en la ropa no estaban. Deje de buscarlos debajo de la cama cuando supe que el hombre del saco no vendría a por mí. Deje de buscarlos en la oscuridad cuando los descubrí en la luz. Cuando vi que no hacia falta que no hubiera luz para que salieran. Cuando me dí cuenta de que se encontraban en cada rincón escondidos dispuestos a salir y hacer daño. Porque los monstruos no siempre tienen esa apariencia. Porque No todo es lo que parece. Porque los monstruos están dentro de cada uno. Porque los monstruos Somos Nosotros.
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