sábado, 14 de diciembre de 2013

Ángel(V).

Tengo un ángel
La vida puede acabarse en una semana. Sin avisar. De repente. Disfrazada de normalidad y rutina la muerte llega poco a poco. Se cuela en los recovecos de un cuerpo que la acepta mientras otros muchos se rebelan contra ella. Tú pusiste resistencia, pero cuando llegó el momento te dejaste ir en la medida en que te dejaron. No sufrías por ti sino por nosotros. Nosotros queríamos que te quedaras mientras tú sabías que ese era el momento adecuado. Ya habías vivido lo justo y necesario. Ya habías dejado tu huella.
Tengo un ángel.
Pálido aunque con la expresión de siempre te has convertido en una imagen que refulge tras mis párpados. Fuiste lo que nosotros hicimos que fueras. Lo hicimos lo mejor que supimos. No se nos puede reprochar nada. Pongámonos una medalla. Te echaré de menos todo lo que un día te eché de más; es cierto, y , sin embargo, no nos arrepentiremos jamás de que nos dejaras vivirte ni de que tú nos vivieras a nosotros. 
Tengo un ángel.
Puede que no crea en el cielo, ni crea que hay una vida después de ésta para nadie, pero tú la tienes para mí. Si no en un mundo más allá, sí en mí. No me cansaré de prometerlo: viviré por los dos como he hecho siempre. Disfrutaré por mí y por mi ángel. Reiré por mí y por mi ángel. La muerte es parte de la vida, y a pesar de que a nadie le hace gracia pensarlo quien muere es al final quien menos sufre. Yo me quedo aquí y solo quiero hacerme una bola; tú te vas y por fin puedes disfrutar al cien por cien. 
Tengo un ángel.
Tengo un ángel, yo y muchas personas más, porque en ti caben todos igual que en casa. Porque tú eres de la familia. Porque tú eres del mundo. Tú eres un ángel, eres nuestro ángel, eres mi ángel.
Tengo un ángel.
Le quiero.

3 comentarios:

Be Unic dijo...

Cuánta razón y cuántos buenos pensamientos y propósitos!
Tu ángel es afortunado de contar contigo! ;)
un besoo!

Anónimo dijo...

Elena, sigue viviendo como lo has hecho hasta ahora, por ti, por él y por todas las personas que te quieren. Nunca estarás sola y siempre tendrás a alguien dispuesto a ayudarte. Tu ángel es muy afortunado de tenerte, brillas con luz propia. Recuerda que la gente que nos deja marcados nunca muere. Un abrazo, ánimo!

Sara dijo...

Los ángeles vuelan, brillando hacia el cielo. Por eso acaban siendo estrellas.
Gracias por esa entrada.